sábado, 22 de diciembre de 2012

Navidad, tiempo de AMOR



Tiempo de AMOR con mayúsculas. 
Me niego a formar parte de la gente, de esa inmensa cantidad de personas que repiten "No me gusta la Navidad",  porque Navidad es una época hermosa, la más hermosa del año, en la que todos volvemos a celebrar que Jesús, el hijo de Dios ha venido hasta nosotros para coger nuestra mano y elevarnos hasta el Cielo. Sólo Él, un niño que nace pobre, un niño que tiene necesidad de una casa, de un calor, de ser querido, aceptado, como muchos de nosotros. Ese niño viene, año tras año, a decirnos que hay vida y hay salvación y alguien nos está esperando más allá de todo esto que nos ciega: las luces y los adornos, el turrón y las bebidas, la fiesta de Nochevieja, los regalos y los gastos.
En Navidad nace Dios un año detrás de otro y nos recuerda, porque todos olvidamos, que hay hambre y enfermedades, hay niños que pasan frío, hay mayores que están solos y podemos celebrar la Navidad derrochando compañía, amor, solidaridad. Esos son los verdaderos gastos que hay que hacer en estos días.
¿Que no están junto a nosotros aquellos a quien quisimos? ¿que hay que compartir la mesa con algunos que no son de nuestro agrado? ¿que los medios nos invitan a gastar y a derrochar? Sí, eso también pertenece al ciclo de Navidad, pero podemos usar este tiempo navideño para sonreír, recordando lo hermoso que nos dejaron en su paso por la vida, cantemos hasta quedarnos sin voz con los niños y acariciemos sin miedo, ni vergüenza a los que tenemos cerca y compartamos con todos, los de aquí y los que están lejos el mensaje de que vuelve un año más la Navidad a decirnos que somos afortunados porque aún tenemos tiempo de cantar los villancicos con los niños y compartir el AMOR.
¡¡¡Feliz Navidad!!!


domingo, 16 de diciembre de 2012

Estamos muy cerca de Navidad y estoy contenta porque tengo la suerte de vivir otro año más estos días de encuentros familiares, de reencuentro con los amigos que no ves durante todo el año y de repetir una vez más los gestos tradicionales que aprendí y viví en mi casa desde siempre. Es tiempo de recordar también a todos aquellos seres queridos que tanto nos enseñaron, que tanto nos dieron y que ahora no están a nuestro lado. Tenemos la obligación de recordarlos con alegría, por todo lo bueno que aprendimos de ellos y que debemos transmitir a nuestros hijos y nietos.
Navidad es un tiempo de amor y de paz, pero no es así porque lo diga la publicidad de los grandes almacenes y las grandes superficies, no, Navidad es la ocasión que nos regala la vida para desempolvar los malos humores, los malos rollos, que dice la gente joven y sacudirnos el polvo y las pelusas que el paso del tiempo va depositando sobre nuestro corazón, nuestra alma o nuestro espíritu, que yo no sé muy bien donde se nos alojan los sentimientos negativos, pero que cuando se va acercando este tiempo hermoso y descolgamos las cortinas para lavarlas y que nuestro salón y nuestra cocina presente un mejor aspecto el día de Nochebuena y cuando sacamos del altillo las cajas que contienen las figuras del Belén y los adornos del árbol, es en esos gestos en los que descubrimos que nosotros mismos tenemos cubiertas nuestras entrañas de basura o basurilla que debemos barrer.
Ya se que me vais a decir que cuando pasan estos días se nos olvidan todos los buenos propósitos y volvemos a caer en la dejadez de no llamar a esa persona que espera con ansias que levantemos el teléfono, o nos da pereza hacer aquella visita al amigo que lo necesita y tantas y tantas cosas que habíamos prometido enmendar; y de nuevo se nos acumula en nuestro interior todas esas impurezas de las que en secreto nos avergonzamos.
Por eso hay mucha gente que proclama que no le gusta La Navidad, pero no es que no le guste, es como una acumulación de sentimientos negativos que no manifestamos abiertamente: Repetir unas rutinas, unos rituales que no conducen a ninguna parte, aparentar que hemos cambiado, pero sin modificar nuestra actitud.. Eso es lo que nos incomoda de celebrar los días de Navidad, el saber íntimamente que hemos fracasado, que cuando llegue Enero con sus rebajas, cada uno de nosotros volveremos a ser rencorosos, orgullosos, envidiosos y todos los "osos" del mundo, pero no debemos olvidar que Navidad es un tiempo que se nos regala, año tras año, para que intentemos cambiar y rectificar nuestra conducta respecto a los otros.
Daos cuenta que no he mencionado al Niño Dios que nos viene a visitar, trayendo Paz y Amor a nuestras vidas en estas fiestas tan entrañables, porque estamos en un país laico donde no es políticamente correcto hablar de estas cosas, que han de quedar en en el ámbito de la intimidad más intima, pero es la excusa perfecta para hacer parada y sacudirnos el polvo de los celos, el rencor y enfrentarnos al nuevo año más livianos de peso, aunque el turrón y los polvorones nos hayan hecho subir en la báscula ¿unos gramos? ¿unos kilos?... ¡Bendita Navidad!
Los que afirman que no les gusta la Navidad, han olvidado que Navidad es el tiempo de alegrarnos por que viene un año más Dios a nosotros para regalarnos la salvación. Los medios de comunicación quieren que olvidemos el autentico mensaje navideño y lo sustituyen con compras y más compras, con las burbujas de las celebraciones de fin de año y los perfumes y los regalos y es por eso que muchos afirman que no les gusta la Navidad, tiempo de gastos y compromisos sociales.
Navidad: Tiempo de amor, de solidaridad, de darnos a los demás como hizo por nosotros ese Niño que nos nace cada año. ¡¡¡Feliz Navidad!!!

miércoles, 3 de octubre de 2012

ENERGY SISTEM



Realmente aún estoy sorprendida de lo que me ha ocurrido. No sé por donde empezar para que comprendáis que en estos tiempos que nos ha tocado vivir de trampas, robos, engaños y burlas, he vivido una experiencia que se sale, desde mi punto de vista, de la normalidad.
Voy a explicarme: 
Las pasadas Navidades "Papá Noel" me trajo un Ebook de la marca ENERGY SISTEM y desde entonces lo he disfrutado plenamente hasta que un aciago día de este verano quise oscurecer la pantalla para poder leer a la orilla del mar y... tanto y tanto lo oscurecí que la pantalla se me quedó negra y ya no pude utilizarlo. Me puse en contacto con ENERGY SISTEM y lógicamente me pidieron los datos del Ebook, la garantía y esas cosas que habían ido a la basura con todos los envoltorios de los regalos de Navidad. 
Desde entonces he recorrido comercios y talleres de reparaciones de aparatos electrónicos, pero todos ellos me remitían a ENERGY SISTEM y la semana pasada volví a escribirles un correo contándole mis cuitas. Ellos me comunicaron que si les ingresaba 34,45€ en su cuenta y les enviaba el libro electrónico verían la forma de resolver el problema. Atrevida que soy y bastante confiada, me dije ¿que puedo perder aparte de los 34,45€? Se lo envié el jueves pasado y el lunes me encontré un aviso de Correos y pensé -muy rápido han resuelto éstos mi problema, voy a recoger el "cadáver"-  Y aquí me tenéis recogiendo un paquete perfectamente embalado y al desliarlo ¡oh sorpresa! contenía un nuevo Ebook, de un modelo mucho más moderno y avanzado que el mio. ¿que os parece? ¿Verdad que tengo motivos para estar sorprendida por el buen hacer de esta empresa? No tengo más remedio que felicitar a ENERGY SISTEM y aconsejar a todo el que tenga dudas a la hora de adquirir un libro electrónico, una tablet o lo que sea, que confíe en la seriedad y profesionalidad de esta marca: ENERGY SISTEM.



sábado, 28 de julio de 2012

Hace veinte años...

Hace veinte años… 

Es una frase que estoy escuchando estos últimos días frecuentemente. Hace veinte años, cuando se estaban inaugurando los Juegos Olímpicos de Barcelona, ¿tú donde estabas? ¿Con quien viste la ceremonia de apertura? Muchos contestan que aún no habían nacido, otros no recuerdan apenas lo que ocurrió en aquel verano, pero yo si me acuerdo y tanto es así que desde hace veinte años, cuento los sucesos de mi vida tomando como eje y guía ese verano, ese mes, esa semana. Recuerdo sucesos y los describo iniciando el relato diciendo: eso fue después de 1992 o aquello ocurrió antes de ese año.
Verano de 1992, playa, sol, reuniones familiares, celebraciones festivas y multitudinarias. Encuentros ante la televisión para ver la inauguración de los Juegos Olímpicos, el desfile de los deportistas, el abanderado, las lágrimas de la Infanta Elena y mi madre siempre presente en todos esos momentos. Si acaso hubiese olvidado todo lo que sucedió ese día tengo ante mí aquella foto de grupo. Todos reunidos entorno a ella.
Después del día veintiséis, siguieron sólo tres días y mi madre se marchó. Luego comenzó otra Era y vinieron las bodas y los nietos y ella ya no estaba aquí para orientarme y guiarme, como siempre había estado, aconsejándome en los detalles que yo nunca detectaba. Se marchó como hacia siempre, en silencio, sin molestar, tan prudente, el día treinta de Julio de aquel año y desde entonces la extraño y la recuerdo y sé que hace veinte años hubo una Expo en Sevilla y en Barcelona unos Juegos Olímpicos.

domingo, 10 de junio de 2012

Subió una mona


Subió una Mona a un nogal.
Y cogiendo una nuez verde,
En la cáscara la muerde;
Con que la supo muy mal.
Arrojóla el animal,
Y se quedó sin comer.
Así suele suceder
A quien su empresa abandona.
Porque halla, como la mona,
Al principio qué vencer.

Ayer estuve en Moratalla. Fue un día muy agradable: amigos, ambiente, clima, comida, ¡mucha comida y toda muy rica!, incluso el regreso fue divertido, a pesar de los mil y un ruido del autobús y sus luces de colores, ahora roja, ahora cuatro, ahora parpadeo... Lo pasamos muy bien, pero yo no escribo esto por los amigos o los ricos alimentos y momentos que compartimos, no.
Ayer descubrí un árbol cuajado de extraños frutos redondos y verdes, cogí uno  y lo mordisqueé y al momento lo tiré ya que su apariencia no me gustó. Pregunté a la gente del entorno cual era su nombre y... ¡era un nogal y aquellas desagradables bolas verdes eran nueces!
Me acordé al instante de mi padre y de la fábula de Samaniego que tantas veces me recitó para enseñarme (como siempre me enseñó a través de fábulas y anécdotas) que las cosas no son fáciles, que los principios siempre cuestan, que no hay que renunciar ante las dificultades iniciales.
Todo esto pertenece al siglo pasado, pero ayer, en Moratalla, el nogal me volvió a recordar que aun sigue siendo necesario el esfuerzo y la constancia para lograr resultados.


lunes, 28 de mayo de 2012


¿Por qué vivo aquí? 

Cuando alguien me pregunta que por qué vivo tan lejos del centro de la ciudad, con lo  absurdo que resulta depender continuamente del transporte: coche, taxi, autobús o amigos, casi nunca sé contestar. Todos me hablan de las grandes ventajas que supone salir de casa y encontrarte en la calle con tantos escaparates, tiendas a tiro de piedra, cafeterías, teatros, amigos... que me quedo siempre callada con la sensación de estar perdiéndome algo muy valioso ¿a cambio de qué?
Es Mayo y ya sé cuál es la respuesta: las rosas de mi jardín. Cuando despierta este mes y salgo a dar una vuelta alrededor de mi casa, me sorprende cada año la presencia de mis rosas. Las hay de todos colores, rojas que al nacer parece que son negras de lo oscuro que se muestra el capullo cuando nace, rosa, pero en tres matices distintos, que se abren poco a poco, amarillas y hasta ¡malvas! ¿ habéis visto alguna vez rosas de ese color?
No muestro ninguna imagen de mis rosas, porque a veces les hago fotografías y nunca consigo en ellas mostrar su belleza, la suavidad de sus pétalos, el aroma con que adornan durante días y días mi casa, a lo largo del mes de mayo. ¡ya sé por que prefiero vivir tan lejos de la ciudad!


lunes, 14 de mayo de 2012

Ayer, trece de Mayo, se cumplían cuarenta y seis años del fin de una etapa y el principio de una nueva en mi vida. 
En mí existen dos personas, más bien varias personas más, de las que en algún momento os hablaré, pero hace cuarenta  y seis años que se esfumó aquella que había nacido y vivido entre nubes de algodón y apareció cubierta, como siempre aparecen los recién nacidos, de sangre, moratones y llanto, aquella de la que ayer se cumplió el aniversario. 
La crisálida que vivía en la oscuridad cálida de la vida familiar, había abierto, hacía poco, las hermosas alas de colores de la adolescencia y juventud alegre, haciendo todo tipo de proyectos de futuro. Voló la mariposa por jardines perfumados y alzó el vuelo hacia el sol y voló durante un corto periodo de tiempo, muy corto y sin que nadie le alertara. sin la mínima sospecha de tormenta, el cielo azul en el que transcurría su vida, se tornó bruscamente, en cuestión de unas horas, en terrible huracán que empezó a golpear a la criatura ingenua a lo largo de trece horribles días: uno, dos, tres... trece días, cada uno peor que el anterior, pero ninguno más terrible que el décimo tercero en el que acabaron tantas cosa;  la vida de mi padre, la sonrisa alegre de mi madre, la ilusión de los planes previstos, la fe en las personas más cercanas... 
De la misma manera que en la Biblia se cuenta que el velo del templo se rasgó un Viernes Santo, también se me rompió el telón de mi vida aquel día de mayo, dejando al descubierto vileza, sin razón, egoísmo, desprecio, soberbia, miserias que existían y que desconocía que estuvieran ocultas por el telón de fondo del hermoso escenario de mi vida pasada.
Han pasado los años, he vivido otras vidas, momentos muy felices, tristezas, emociones y ahora soy como esas muñecas, las matriuskas, que ocultan en su interior, muñecas y muñecas, distintas, parecidas, diferentes, iguales... cada una de ellas tiene una historia propia y al final ¿quien soy yo? ¿la pequeña? ¿la grande? ¿la mediana? ¿Soy aquella que vio morir un día de mayo, ya lejano, al padre al que aún añoro? ¿o la madre, la hermana, la abuela que ahora soy? No lo sé, solo sé que aquel día algo grande ocurrió y marcó para siempre mi vida. Aún te extraño, papá, hasta luego.

domingo, 1 de abril de 2012

POEMA DE SARAMAGO



POEMA DE SARAMAGO
¿Que cuántos años tengo? - ¡Qué importa eso !
¡Tengo la edad que quiero y siento!
La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso.
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso o lo desconocido...
Pues tengo la experiencia de los años vividos
y la fuerza de la convicción de mis deseos.

¡Qué importa cuántos años tengo!
¡No quiero pensar en ello!
Pues unos dicen que ya soy viejo/a,
y otros "que estoy en el apogeo".
Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice,
sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte.

Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso,
para hacer lo que quiero, para reconocer yerros viejos,
rectificar caminos y atesorar éxitos.

Ahora no tienen por qué decir: ¡Estás muy joven, no lo lograrás!...
¡Estás muy viejo/a, ya no podrás!...
Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma,
pero con el interés de seguir creciendo.

Tengo los años en que los sueños,
se empiezan a acariciar con los dedos,
las ilusiones se convierten en esperanza.

Tengo los años en que el amor,
a veces es una loca llamarada,
ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada.
y otras... es un remanso de paz, como el atardecer en la playa..

¿Qué cuántos años tengo?
No necesito marcarlos con un número,
pues mis anhelos alcanzados,
mis triunfos obtenidos,
las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones truncadas...
¡Valen mucho más que eso!
¡Qué importa si cumplo cincuenta, sesenta o más!

Pues lo que importa: ¡es la edad que siento!
Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos.
Para seguir sin temor por el sendero,
pues llevo conmigo la experiencia adquirida
y la fuerza de mis anhelos

¿Qué cuántos años tengo?

¡Eso!... ¿A quién le importa?

Tengo los años necesarios para perder ya el miedo
y hacer lo que quiero y siento!!.
Qué importa cuántos años tengo.
o cuántos espero, si con los años que tengo,
¡aprendí a querer lo necesario y a tomar, sólo lo bueno!

viernes, 30 de marzo de 2012

Como me gusta escribir y tengo tanto miedo a equivocarme he buscado, como siempre, por la Red y he encontrado en Ciudad Seva este escrito que contiene 19 consejos muy útiles para lanzarse al mundo literario. 
Os lo regalo... ¡jajajaja!


Cómo ser un buen escritor
19 consejos para un aspirante a escritor


1 Lo primero hes conozer vien la hortografia. 
2 Cuide la concordancia, el cual son necesaria para que Vd. no caigan en aquellos errores. 
3 Y nunca empiece por una conjunción. 
4 Evite las repeticiones, evitando así repetir y repe

tir lo que ya ha repetido repetidamente. 
5 Use; correctamente. Los signos: de, puntuación. 
6 Trate de ser claro; no use hieráticos, herméticos o errabundos gongorismos que puedan jibarizar las mejores ideas. 
7 Imaginando, creando, planificando, un escritor no debe aparecer equivocándose, abusando de los gerundios. 
8 Correcto para ser en la construcción, caer evite en transposiciones. 
9 Tome el toro por las astas y no caiga en lugares comunes. 
10 Si Vd. parla y escribe en castellano, O.K. 
11 ¡Voto al chápiro!... creo a pies juntillas que deben evitarse las antiguallas. 
12 Si algún lugar es inadecuado en la frase para poner colgado un verbo, el final de un párrafo lo es. 
13 ¡Por amor del cielo!, no abuse de las exclamaciones. 
14 Pone cuidado en las conjugaciones cuando escribáis. 
15 No utilice nunca doble negación. 
16 Es importante usar los apóstrofo's correctamente. 
17 Procurar nunca los infinitivos separar demasiado. 
18 Relea siempre lo escrito, y vea si palabras. 
19 Con respecto a frases fragmentadas. 
F IN

miércoles, 21 de marzo de 2012

Y ahora Semana Santa


 Ya sé que este año me he retrasado mucho para hablaros de mi Semana Santa, pero tengo razones para ello. La primera y principal es que los años no pasan en balde y todas mis actividades inherentes a la preparación de estos hermosos días, las voy realizando mucho más pausadamente.
El Miércoles de Ceniza, con la salve ante la Virgen de la Caridad, ya queda lejos, así como el Vía Crucis, el Triduo y el Miserere. Todos los actos previos a la Semana Santa de Cartagena me resultan cada año más difíciles de cumplir: Recogida del vestuario de los penitentes y monaguillos, el arreglo y casi cada año, confección de nuevas túnicas de nazareno, todo me resulta cada año más complicado y es que no quiero reconocer que la edad me van pudiendo y aunque estoy convencida de que llegará el día en que tenga que tirar la toalla, no quiero dejar de ser la responsable de que toda mi gente salga el Viernes Santo (y el Lunes y La Madrugada y el Sábado Santo...) listos para revista, sin ningún fallo, con los guantes adecuados, la medalla con los nudos correspondientes al cargo de cada cual, las zapatillas, los lazos...
Ya están colgadas en casa, repartidas por diferentes lugares, túnicas grandes y chicas, desde la del más pequeño, que aún no ha cumplido el año, hasta la del responsable de que toda la familia esté "infectada" del virus procesionil.
 Las varas de cada uno están limpias, las medallas con sus cordones, calcetines, zapatillas, caramelos y tarjetas, imperdibles que no falten para arreglar al momento el fallo cuando aparezca. ¿De cuantos días dispongo para terminar los bajos y las mangas de tanta ropa morada? ¿lloverá para esa fecha? ¡Dios no quiera! O quizás Dios si lo quiera y hágase Tu voluntad y otro año y otra Semana Santa que llega y yo viendo, que como todos los años, me va a tocar otra vez correr los últimos días y si no...¡al tiempo!

sábado, 25 de febrero de 2012

Arriado de bandera


¿Qué queréis que os diga? Me gusta, me emociona y me siento muy orgullosa de ser española. Lo siento por aquellas personas que no sientan como yo, pero ayer, concretamente, disfruté muchísimo presenciando el arriado de bandera en la explanada del muelle. Fue un acto castrense, disciplinado y hermoso. Queramos o no queramos reconocerlo, Cartagena y su gente se reúne cuando hay una convocatoria de este tipo. Nos gusta la marcialidad en los desfiles (y si no que se lo digan a nuestros procesionistas), nos gusta escuchar los toques del cornetín de órdenes y ver la respuesta de nuestras fuerzas armadas, el rezo de oración a la caída de la tarde, las marchas alegres (ayer sonaba Ganando barlovento cuando se retiraban del acto), en fin, tal vez yo esté confundida, pero ayer tarde nos reunimos en la explanada del muelle un buen número de cartageneros y no cartageneros a presenciar un acto hermoso de homenaje a nuestra bandera. ¡Gracias a la Infantería de Marina!

viernes, 13 de enero de 2012

de vez en cuando la vida...



De vez en cuando, la vida nos besa en la boca...

Esta noche canturreo a Serrat y es que es verdad, que de vez en cuando la vida te da sorpresas, alegrías, te acaricia.
Hoy me han acariciado y no con manos. Hoy he recibido palabras amables, sonrisas, halagos y todo, sin saber por qué.
Hace meses que no me acercaba por aquí, porque no tenía motivos suficientes para escribir. Sí es cierto que no me puedo quejar de como me está tratando la vida, no tengo derecho a pedir el libro de reclamaciones, no, estoy viviendo una etapa dulce en la que todo va bien, yo estoy bien, mi gente está bien, pero tal vez por esa misma normalidad, no me doy cuenta de lo afortunada que soy por poder decir "no pasa nada", pero esta tarde me ha ocurrido algo muy curioso y sorprendente. Varias personas, sin ponerse de acuerdo y de forma sucesiva, me han dicho cosas agradables, me han ensalzado, me han felicitado y juro que no entiendo todavía el por qué de tanta amabilidad. Ha sido totalmente gratuito, no esperaban de mi nada a cambio. ¡Un regalo!
Desde el siglo pasado (y aseguro que no exagero) no me había sentido tan acariciada como esta tarde y lo más fabuloso de todo esto es que quienes me han prodigado todas esas palabras cariñosas ¡eran mujeres!
Eso ha sido lo que más me ha congratulado y lo que me ha dejado sintiendo mariposas dentro de mí.
Por eso canturreo con Serrat aquello de "De vez en cuando la vida nos pasea por las calles en volandas y nos sentimos en buenas manos"
Gracias a mis acariciadoras por reconciliarme con este planeta y sus habitantes. No tenéis ni idea del bien que me habéis hecho. Gracias, gracias y gracias.